Hace muchos milenios atrás, surgió una especie especial, el Hombre, aquí tratado como HOMBRES-MONO!, por la familiaridad y por el tronco evolutivo común, un primate típico. Tal hombre-mono empezó, bien al princípio, respetando y temendo la naturaleza, pero el desarrollo de su mente, de su inteligencia lo hizo inquieto, dominador y ambicioso. Ahora, él siempre quiere TODO Y AHORA, y de su manera. Él creó sus fantasías, sus mentiras, y sus MÁSCARAS, para obtener lo que deseaba. Y así, él se hizo poderoso, se diseminó por el globo, alteró la ruta de la naturaleza, artificializó su vida, y, por eso, se volvió VULNERABLE. Su superpoblación obedece a las reglas ecológicas rígidas de la naturaleza, y por eso, muchos están HAMBRIENTOS, tristes, desesperados, locos y muy desunidos… Sin embargo, con el patrimonio del conocimiento y experiencia adquiridos, los seres humanos deberían estar MÁS CERCOS unos de otros, deberían percibir que TODO ESTÁ EN CICLOS, para que NUNCA NEGOCIE SU SONRISA. Debería PRESTAR ATENCIÓN en la vida, en las cosas, intentar conocerse, pero también interesarse por los demás … Saber distinguir: ¿QUIÉN es QUIEN? ¿Qué es lo que? ¿Qué realmente tenemos que hacer? Porque el TIEMPO es implacable.

“En este proyecto, el hombre-mono es retratado como el lado primitivo, más instintivo del ser humano. Pero, eso es sólo un juego de palabras, llamando la atención a una injuria o expresión despectiva que se ha vuelto universal, cuando las personas son agredidas moral y psicológicamente por apodos de ese tipo. En realidad, cuando estudiamos la naturaleza de los animales y la historia, percibimos que llamar un “Gorila” o un “Mono” de “Humano” es que sería la verdadera ofensa “.

“A pesar de las acciones destructivas, hechas por una minoría de Hombres-Mono, hay otro polo que cultiva el bien y que intenta reequilibrar esa balanza en favor de una mayoría de personas que, por falta de recursos, falta de conocimiento, siempre entran en la rueda viva, que la primera minoría impulsa”.

“Hoy somos rehenes, en el día a día, de una minoría de personas, países y empresas mal intencionadas y egoístas”.

“Aunque todos nosotros estamos viviendo una situación conmovedora, todavía poseemos las llaves y los portales, que pueden ser abiertos a una realidad mejor. A pesar de las escenas tristes y chocantes, al mismo tiempo todavía vemos hechos y ejemplos de acciones verdaderamente “humanas”, de cooperación y de caridad gratuitas. La especie humana es la más fea y monstruosa que se puede conocer, pero al mismo tiempo, la más bella y maravillosa, por la potencialidad de amar y hacer el bien. Y, que a pesar de todo, es la única especie que puede reequilibrar la dirección para uno camino de armonía en el globo.”

“Despite the destructive actions done by a minority of Monkey Men, there is yet another pole that cultivates good and attempt to re-equilibrate this balance, for the benefit of the majority of people, that in function lack of knowledge and lack of resources, are inserted in the wheel of life that the first ones impel.”

“Today we are hostages, day-to-day, of a minority of people, countries and companies malicious and selfish.”

“Although we are all living in a commoving situation, still are we that possess the keys and the portals that can be opened to a better reality. Despite the sad and shocking scenes, at the same time we still see facts and examples of truly “human” actions, of free enterprise and charity. The human race is more ugly and monstrous that it is possible to meet, but at the same time, is the more beautiful and wonderful, by the potentiality of loving and doing goodness. And so, we are the specie unique that can rebalance the route to the path of harmony on the globe.”

“Hoje somos reféns, no dia-a-dia, de uma minoria de pessoas, países e empresas mal-intencionadas e egoístas”.

“Embora todos nós estejamos vivendo uma situação comovente, ainda possuímos as chaves e os portais, que podem ser abertos para uma realidade melhor. Apesar das cenas tristes e chocantes, ao mesmo tempo ainda vemos fatos e exemplos de ações verdadeiramente “humanas”, de cooperação e de caridade gratuitas. A espécie humana é a mais feia e monstruosa que se pode conhecer, mas ao mesmo tempo, a mais linda e maravilhosa, pela potencialidade de amar e fazer o bem. E, que apesar de tudo, é a única espécie que pode reequilibrar a rota para o caminho da harmonia no globo”.